CLAUDIA LARRETA

Fuente fotos: Diseño+Moda+Pasarela

Una colección ultrafemenina y clásica, inspirada en los años 50, que abarcó desde prendas para usar durante el día hasta modelos de alta noche.
Para el día primaron los pantalones blancos, frescos y veraniegos acompañados por chaquetas o accesorios en colores vibrantes como amarillo, naranja y fucsia. También se destacaron los chemises y los soleros en texturas livianas, rectos o con faldas acampanadas.
A su vez, se hicieron presentes los tailleurs, compuestos por chaquetas y pantalón cigarrete combinando tonalidades intensas como el violeta y el verde o el fucsia, entre otros.
La colección también contó con una pasada en blanco y negro: Tailleurs comprendidos por chaqueta acompañados por pollera o pantalón. También se hicieron presentes los soleros en esta clásica combinación.
La noche se destacó por su elegancia: Trajes cortos y largos en los colores de la temporada (verde, violeta, azul, fucsia y naranja, entre otros). Se destacó la oposición de las tonalidades: Verde y violeta; fucsia y naranja, también el degradé. Los volados, los apliques florales, el plisado y los bordados en piedras tuvieron protagonismo.